PABLO M. OTERO
Actualizado 12/06/2025 - 23:00CEST
El Mirandés sigue haciendo historia. Un equipo diseñado para luchar por la salvación se metió en los playoffs de ascenso a Primera por primera vez y ahora jugará la final contra el Real Oviedo tras superar al Racing, el gran dominador de LaLiga Hypermotion en el arranque del campeonato. Anduva volvió a empujar con el alma. Al equipo que más puntos sumó como local en toda la temporada le servía el empate para clasificarse, pero ganó con tres goles en siete minutos y cierta dosis de fortuna.
José Alberto revolucionó el once. Hasta cinco novedades con respecto a la ida en Santander. Cambios en el doble pivote (Maguette y Vencedor entraron por Aldasoro y Meseguer, que se cayó de la convocatoria por un proceso vírico).
El Racing entró mejor al partido, presionando muy arriba. Pero el Mirandés golpeó en la primera que tuvo. En el minuto 7, incorporación de Hugo Rincón por banda derecha. El lateral superó en velocidad a Mario García y puso un pase maravilloso para que Izeta la empujase llegando solo. El 1-0, muy parecido al 0-1 en El Sardinero. Los cántabros reaccionaron rápido y en el 12', Maguette empató (1-1) llegando desde segunda línea para meter el interior del pie tras el centro de Andrés Martín, quién si no... 18ª asistencia del curso para el futbolista sevillano.
Aparecieron los nervios en Anduva. Andrés Martín tuvo el 1-2, pero Raúl Fernández se la sacó en el mano a mano. El partido era de ida y vuelta. El Mirandés respondió con ocasiones de Panichelli (por alto es imparable) e Iker Benito. El ritmo bajó tras la pausa de hidratación, aunque Hugo Rincón, un martillo constante por su flanco, tuvo dos buenas ocasiones que desbarató Ezkieta. El primer tiempo terminó con un empate que conducía la eliminatoria a la prórroga.
Siete minutos mágicos
La segunda mitad comenzó con una amarilla a Egiluz por falta a Andrés Martín y un cabezazo de Víctor Parada que se fue alto tras centro de Reina. En el 56', Ezkieta volvió a salvar a su equipo sacando una gran mano para desviar un remate de cabeza que iba dentro. José Alberto movió ficha, con la entrada de Arana por Karrikaburu. Y cuando el reloj sobrepasaba la hora de partido, doble mazazo para el Racing, con dos autogoles (de Ezkieta y de Javi Castro) en sólo tres minutos. Ahí se acabó la historia. Y el golpe no quedó ahí. En el 70', conexión Panichelli-Izeta para que el 17 firmase el 4-1, y el doblete, clavándola en la escuadra. JAL se la jugó con todo introduciendo una triple sustitución, pero era demasiado tarde y quedaba poco tiempo para reaccionar.
Panichelli, cuando no marca, asiste
El Mirandés enlaza ya ocho encuentros sin perder y llega cargado de moral a la final por el ascenso. El cuarto clasificado en Liga subió en los playoffs las dos últimas temporadas. ¿Se repetirá la historia?